Éric Ott

Maison de la Paix, Ginebra

Geneva - Suiza - 2013

Como institución educativa y de investigación, el Instituto de Altos Estudios Internacionales y de Desarrollo (IHEID) de Ginebra está comprometido con la promoción del diálogo interdisciplinar sobre cuestiones de relaciones internacionales. Situada al oeste de la estación de tren de Ginebra-Sécheron, la “Maison de la Paix”, finalizada en 2013, es el corazón del campus del mismo nombre. La arquitectura de Éric Ott, de IPAS en Neuchâtel, simboliza cierto prestigio. Cuando recientemente fue necesario renovar las fachadas interiores y partes de los elementos de acceso, se eligieron productos de la empresa suiza Forster Profilsysteme AG.

fuego light Puertas and fuego light Ventanas - Maison de la Paix, Ginebra located in Geneva, Suiza

Tras el final de la Primera Guerra Mundial, el IHEID —entonces llamado Instituto Universitario de Altos Estudios Internacionales de Ginebra— fue fundado en 1927 con el objetivo de promover la diplomacia y las relaciones internacionales, y así evitar la repetición de las devastadoras experiencias de la guerra. Desde 2013, la “Maison de la Paix” en Ginebra constituye la expresión arquitectónica más reciente de la sede de esta institución de investigación y enseñanza.

Además de albergar la administración y las instalaciones docentes del IHEID, el nuevo edificio también acoge una docena de organizaciones internacionales dedicadas a la paz, incluidas tres instituciones financiadas por la Confederación Suiza. Entre ellas se encuentran el Centro de Ginebra para la Política de Seguridad (GCSP), el Centro Internacional de Ginebra para el Desminado Humanitario (GICHD) y el Centro de Ginebra para la Gobernanza del Sector de la Seguridad (DCAF). En general, la Maison de la Paix se concibe asimismo como un lugar de encuentro, debate y reflexión sobre cuestiones y tendencias en el ámbito del mantenimiento de la paz y del fortalecimiento de las relaciones internacionales.

Un lenguaje arquitectónico expresivo por dentro y por fuera

En 2008, el estudio de arquitectura Eric Ott ganó el concurso para el proyecto de la “Maison de la Paix”. Cinco años más tarde, Ott, junto con su oficina IPAS, creó un complejo de seis edificios independientes que, por su forma y disposición, evocan simbólicamente pétalos. Estos volúmenes lenticulares, afilados y contiguos, se encuentran y convergen en ángulos agudos para formar una unidad orgánica.

Todo el conjunto está envuelto por fachadas de un matiz azulado y brillante. Sus curvas fluidas y regulares les confieren una claridad excepcional y una sensación de dinamismo a través del juego entre reflejo y transparencia. Este principio de diseño transparente se prolonga ampliamente en los espacios interiores. Grandes atrios inundados de luz reproducen las formas ovaladas de las líneas exteriores, dando lugar a una ausencia total de superficies rectas.

La combinación de este acristalamiento interior con las escaleras helicoidales escultóricas y los elementos portantes del edificio define el carácter sobrio del proyecto. De este conjunto emerge una visión en la que los elementos estructurales de hormigón visto se suavizan gracias a la presencia omnipresente de superficies acristaladas sin montantes.

Renovación del acristalamiento interior

Pocos años después de su finalización, todo el acristalamiento interior tuvo que ser sustituido debido a un defecto de diseño. Esto incluyó el acristalamiento interior de los atrios, las escaleras de caracol, los auditorios, las cocinas office, así como parte del acristalamiento en las zonas de transición entre espacios de las distintas plantas.

El cliente optó por utilizar sistemas de perfiles Forster, capaces de satisfacer plenamente los requisitos estructurales, normativos y estéticos. En total, 41 puertas cortafuego y de vías de evacuación, de una y dos hojas, con forster fuego light EI30, permiten una compartimentación óptima contra incendios. Además, 1.375 metros cuadrados de elementos fijos forster fuego light EI30/EI60, de vidrio a testa sin montantes intermedios, proporcionan la máxima entrada de luz en el acristalamiento interior del atrio, el auditorio y las cocinas office.

Los elementos acristalados no solo garantizan las funciones de protección contra incendios, protección contra caídas y compartimentación, sino que también contribuyen, como envolvente transparente, a la estética y simbolismo de este icono de la arquitectura contemporánea, reconocido mucho más allá de las fronteras del país.